Texto publicado por Carinosanto

¡CUIDADO CON LA SAL!

Moderar la sal

Es urgente que la gente empiece a retirar los saleros de las mesas.

Colombia es uno de los países de América Latina con el consumo de sal más elevado por persona. Este es un dato alarmante, si se tienen en cuenta los riesgos que para la salud implica la ingesta exagerada de sodio, que es el ingrediente principal de este condimento.

Una persona no debería consumir más de cinco gramos de sal al día, que equivalen a 1,5 gramos de sodio. Sin embargo, estudios serios han demostrado que los hombres en el país alcanzan los 5,5 gramos de sodio; o sea, casi 14 gramos de sal. Las mujeres, por su parte, bordean los 4 gramos de sodio, lo que quiere decir que ingieren 10 gramos de sal todos los días.

El problema es que a pesar de que el sodio es necesario para el correcto funcionamiento del organismo, el alto consumo de sal es una de las principales causas de hipertensión arterial y un determinante de accidentes cerebrovasculares, insuficiencia cardiaca e infarto.

Además, la ingesta excesiva altera el funcionamiento de los riñones, predispone a la formación de cálculos renales, disminuye la cantidad de calcio en los huesos, retiene líquidos, altera el funcionamiento del aparato respiratorio e, incluso, se ha relacionado con el desarrollo de algunos tumores.

Además, a la sal se le agrega flúor y yodo para compensar el déficit de estos componentes en la población. Así que al ingerirla en altas cantidades, el organismo también los recibe de manera abundante, lo que acaba favoreciendo la génesis de fluorosis y alteraciones tiroideas.

Nunca es tarde para empezar a ejercer control desde los hogares. Es urgente que la gente empiece a retirar los saleros de las mesas; de este modo se logrará, por lo menos, atenuar la colombiana costumbre de echarle sal a la comida incluso antes de probarla, como a veces es tradición.