Texto publicado por zair fernandez aboal

um dia um joven salio por las calles de su ciudad a buscar empleo , despues de haver caminhado uma gran distansia y sin haver conseguido su objetivo , estava com mucha sed y golpeando em uma casa le resibio uma joven senhora que mirandole y viendo que tenia mucha sed le dio um vaso de leche y el agradesido volvio para su casa, algunos anos despues esse joven se resibio de medico y fue a trabajar em um hospital de la capital de aquel pais, y al mismo tempo aquella joven sehora já com algunos anos mas llego a aquel hospital para submeterse a uma sirurgia por causa de uma enfermedad que padesia con riesgo de muerte , y aquel resien resibido medico sabendo que aquella senhhora estava em aquel mosocomio se interesso por su caso y le ajudo em todo su estadia y siendo el mismo que le realizo la intervension quirurjica, despues de um tempo de recuperacion , le dieron de alta y al resibir la factura del hospital em el final de la factura desia pago con um vaso de leche, asi es la vida , hazemos cosas sin esperar recompensas pero dios que es justo no se olvida de lo que hazemos por aquellos que vienen a nosotros con uma nesecidad y les oferecemos uma ajuda sea de carinho o economicamente y nos da la recompensa por eso esta escrito que no nos cansemos de hazer el bien que a su tempo tendra su recompensa