Texto publicado por Jaime Nelson Arboleda Barrera

Un marido infiel.

Un marido, regresa a su casa después de asistir a las últimas Olimpiadas de Beijing. En su estadía mantuvo relaciones sexuales sin protección con una oriental.
Unas semanas después de llegar a su casa; se levantó una mañana y descubrió que su pene estaba lleno de unas manchas verdes y moradas. 
Horrorizado, se va a ver al médico inmediatamente.
El doctor le ordenó unas pruebas y después le dice:
Le tengo malas noticias:
- Usted está infectado por un virus extraño, que proviene de Mongolia.  Es extremadamente raro y lo siento, pero no hay cura. Vamos a tener que amputarle el pene. 

El hombre grita invadido por el horror:-¡Nooooo!
¡Quiero una segunda opinión!

El doctor le dice:
-Bueno, es su decisión, pero le aseguro que la amputación es la única solución..

Al día siguiente el hombre se busca un doctor chino.
El doctor lo examina y proclama:

-¡¡¡Ohhhh!!!... Vilus de Mongolia. ¡Muy lala enfermedad!

-Sí.... Sí.... Ya eso lo sé; pero... ¿QUÉ PUEDE HACER UD?
¡¡¡OTRO DOCTOR QUIERE AMPUTARME EL PENE!!!
El doctor chino se ríe, moviendo la cabeza:

-¡ESTÚPIDO DOCTOL! ¡SIEMPLE QUIELE OPELAL,
¡PALA SACALE MÁS PLATA! ¡ESTO NO NECESITA OPELAL!

-¡¡¡Gracias a Dios!!!
-Contesta el paciente, agradecido y feliz...

-NO SE PLEOCUPE -dice el doctor:

A VEL... SALTE... 
SALTE....
SALTE....
SALTE....
¿VE?
¡Se le cayó solito!