Texto publicado por Jaime Nelson Arboleda Barrera

Los 4 estados de la materia.

Fernando Germán Benítez Pérez-Fajardo > ‎

Los cuatro estados de la materia.
La besó. Se entretuvo, se deleito con el roce de sus labios de seda. Se
dejó hacer y deshacer. Del estado sólido fue pasando al líquido, suave,
inevitablemente. Así, en ese estado, se deslizó por el cuello dejando un
surco de pasión, hasta llegar a sus pechos, lugar donde, abrasado por el
deseo, sintió cómo se evaporaba, rápida, ardientemente, para condensarse
de nuevo en su vientre. Como fluido nuevamente, descendió hasta el lugar
donde recuperó toda su solidez, urgente, impacientemente.
Lo mejor vino después...

F.B.