Texto publicado por Fátima Osores
¿ALGUIEN ADIVINA? ¡ES MUY FÁCIL!
Esto lo acabo de escribir para un taller literario que estoy haciendo. Y la preguntita es: ¿a qué me refiero?
Están todo el tiempo en la cocina, la una junto a la otra. La más joven, hasta donde recuerdo, siempre desnuda. La mayor, en cambio, necesita cubrir su fragilidad o sus muchos años. Más alta y más rústica, podría contar un pasado ajeno a esta casa, pues procede de la familia materna.
La chica y la vieja, así las llamamos y cada una tiene su rol bien definido: en una se come, en la otra se cocina.