Texto publicado por Maiko Roiz

mis amigos ahora en materia de sucesos!

Mata a su mujer a palazos. La violencia se apoderó ayer de Orlando Morales, de 38 años, cuando mató a su mujer delante de sus cuatro hijos en el sector Curaribe de La Cañada de Urdaneta.

La discusión surgió ayer cuando la víctima, a quien identificaron como Judith Margarita Caldera (32), le exigió a su pareja aportar más de su sueldo como
pescador para el mantenimiento del hogar. En un arranque de ira Morales la golpeó con el palo de una escoba en la cara, cuello y abdomen al menos unas
20 veces hasta dejarla inconsciente y huyó. 

Los niños, al ver que su madre estaba malherida,y no respondía a sus llamados, comenzaron a gritar pidiendo auxilió a los vecinos. Con ayuda de algunos
miembros de la comunidad, a Caldera la trasladaron al Hospital de La Cañada a la 1.00 de la tarde de ayer. Tenía hematomas en el cuerpo y en la cara. No
resistió los golpes y falleció dos horas después de su ingresó. 

El sábado en la noche Morales bebió en su casa con sus familiares y discutió con su mujer. Se presume que el agresor aún se encontraba en estado de embriaguez
cuando la agredió.

Los inspectores de la Policía científica interrogaron anoche a las hermanas de Caldera. Ellas aseguraron desconocer el paradero de su cuñado. Una fuente
policial informó a La Verdad que Morales asesinó a su mujer, porque ella se negó a levantarse temprano ayer para prepararle comida. 

Hasta el cierre de esta edición una comisión especial del Eje de Homicidios se encontraba en La Cañada, peinando el municipio en busca del homicida. 

Violencia doméstica

Caldera había denunciado a su pareja antes por violencia doméstica. Morales la agredía constantemente luego de ingerir alcohol. Trascendió que el hombre
solía hacer fiestas y reunirse con su familia a tomar todos los fines de semana. Se desconoce si agredía a sus hijos. mas en sucesos, El "Cunaguaro" hace estragos en la COl. Desde hace dos meses rastrean a David Nava, apodado el “Cunaguaro”. La Policía lo acusa de pertenecer a los sicarios de los Meleán y de cometer al menos
10 homicidios en el municipio Miranda. No actúa solo; en sus fechorías, presuntamente, lo acompaña su hermano, el "Vilito". 

Fuentes de la Policía científica describieron al "Cunaguaro" como un hombre de piel blanca, contextura gruesa, de unos 27 años, cuya estatura oscila entre
1.60 y 1.70. Su familia es oriunda de Los Puertos de Altagracia y entre sus vecinos, su palabra es ley. Un informante de la Costa Oriental del Lago, indicó
que los hermanos Nava viven especificamente en el sector El Guárico. 

Tras las investigaciones, los agentes señalan a los hermanos Nava de su supuesta participación en el homicidio de Carlos Oquendo (34) el domingo 27 de
abril en la calle 85, entre las avenidas 13 y 14 del sector Belloso. El muchacho era hijo de Wílmer Oquendo, exalcalde del municipio Miranda.

Trascendió que en el crimen de Oquendo también participaron Yoici Ramón Fernández Finol (21), alias el “Josy Matos”, y Alejandro José Paz Reverol (32),
apodado “Alex el Pecoso”, a quienes la Policía científica de la subdelegación Dabajuro, en Falcón, ultimó hace dos meses en una zona enmontada del sector
Capatárida, municipio Buchivacoa. El “Josy Matos”, vivía en el sector El Calvario, y “Alex el Pecoso”, en Los Jovitos de Los Puertos de Altagracia. 

El informante indicó que Fernández participó en 12 sicariatos. Tanto los fallecidos como los Nava pertenecían a una banda dedicada al sicariato y a la
extorsión en los municipios Miranda, Cabimas y Santa Rita. La Policía científica y todas las autoridades del estado están tras la pista del “Cunaguaro”
y el "Vilito", quienes aún siembran terror en la Costa Oriental del Lago.

Crimen de Oquendo

A Carlos Oquendo lo acribillaron el día de la procesión de Jesús de la Misericordia. Sus asesinos los persiguieron desde Los Puertos de Altagracia hasta
Maracaibo, donde vino a jugar caballos con su primo Jesús Velazco.

A las 6.00 de la tarde, los sicarios interceptaron a los primos cuando salían en un Lancer Chevrolet vino tinto, placa KAH95Z, de una peña hípica. En el
camino los dos sujetos en moto los comenzaron a seguir, contó Velázquez, quien iba de copiloto y sobrevivió al ataque. Carlos, al notar que era seguido
por los motorizados, aceleró el vehículo, pero estos lo alcanzaron.

“Se pegaron mucho al carro del lado del piloto. El parrillero sacó de la espalda el arma con cocosete y como íbamos con los vidrios ahumados abajo metieron
el arma por la ventana y la vaciaron en contra de Carlos”.

Jesús, al ver a los hombres armados y escuchar las primeras detonaciones, se agachó debajo del tablero. Las balas no lo alcanzaron, pero sí la sangre de
su primo. El asesinato de Oquendo provocó un toque de queda en Los Puertos.