Texto publicado por SUEÑOS;

(3) Informaciónes Interesantes,

la primera,
Zoología.

Murciélagos capaces de detectar ranas por las ondulaciones que éstas
imprimen al agua.

Cuando el macho de rana túngara canta serenatas a las hembras desde una
laguna, crea ondulaciones en el agua que lo hacen más fácil de detectar para
uno de sus depredadores, el murciélago. Así se ha constatado en una reciente
investigación.

Una rana túngara detiene su serenata de cortejo si observa a un murciélago
volando cerca, pero las ondas en el agua se siguen moviendo varios segundos
después de que la rana cese su actividad, y eso puede permitirle a un
murciélago astuto localizar al animal emisor. El equipo de Mike Ryan, de la
Universidad de Texas en Austin, Estados Unidos, y Wouter Halfwerk, de la
Universidad de Leiden en los Países Bajos, ha comprobado que los murciélagos
son capaces de usar la ecolocalización (una forma natural de sónar) para
detectar esas ondas, y a partir de ellas, a su emisor.

Esta capacidad demuestra el grado de sofisticación al que la evolución ha
llegado en esta especie de escalada armamentística entre las habilidades
depredadoras del murciélago y las habilidades defensivas de la rana.

Una rana y, en el agua de su alrededor, las ondulaciones delatadoras. (Foto:
Ryan Taylor / Universidad de Salisbury)

El macho de rana túngara (Physalaemus pustulosus), nativa de América Central
y del Sur, pasa sus noches cantando desde la superficie de lagunas poco
profundas, con la intención de atraer la atención de una hembra. Al emitir
sus sonidos, su saco vocal se infla y desinfla como un globo. El movimiento
de este saco pulsante es visible, pero además también genera una tercera
señal: las ondas en la superficie del agua.

Los investigadores han comprobado que los murciélagos Trachops cirrhosus,
que se alimentan de ranas, son mucho más propensos a atacar a una que emite
sus sonidos de cortejo y además genera ondulaciones en la superficie del
agua, que a una rana que canta pero sin generar esas ondulaciones en el
agua. Esto indica que los murciélagos son capaces de detectar esas
ondulaciones y además identificarlas correctamente, siempre y cuando las
condiciones sean las adecuadas. Los murciélagos pierden esta ventaja cuando
el área que rodea a la rana está cubierta de hojarasca, lo que puede impedir
que se propaguen las ondulaciones sobre la superficie del agua.

En la investigación también han trabajado Patricia Jones del Instituto
Smithsoniano de Investigación Tropical (STRI) en Panamá, Ryan Taylor de la
Universidad de Salisbury en Maryland, Estados Unidos, y Rachel Page de la
Universidad de Texas en Austin.

la segunda, Neurología.

La edad no es un obstáculo para la regeneración de neuronas.

Se ha descubierto que lo que limita de manera determinante la regeneración
neuronal no es la edad sino la insulina. El hallazgo se ha hecho en gusanos
envejecidos, pero es posible que la misma situación descubierta ocurra en
otros animales, incluyendo al Ser Humano.

En los gusanos estudiados, la insulina es lo que inhibe la capacidad de las
neuronas motoras para repararse, un descubrimiento que sugiere que el
deterioro de la salud del sistema nervioso podría no ser inevitable.

A medida que envejecen, todos los organismos sufren una reducción de su
capacidad para regenerar porciones dañadas del sistema nervioso. Un nuevo
estudio, realizado por el equipo de Marc Hammarlund y Alexandra Byrne, de la
Universidad Yale en New Haven, Connecticut, Estados Unidos, sugiere que este
déficit no se debe específicamente a las acciones destructivas comúnmente
provocadas por el paso del tiempo.

Representación artística de una neurona. (Imagen: Amazings / NCYT / JMC)

El sistema nervioso regula su propia respuesta ante la edad,
independientemente de cómo lo haga el resto del cuerpo. Mediante
manipulación de la vía en la que participa la insulina, es factible obtener
animales que vivan más tiempo de lo normal pero cuyo sistema nervioso
envejezca al ritmo normal, o, a la inversa, obtener animales que mueran a
edades normales pero cuyo sistema nervioso se mantenga joven hasta el final.

En la investigación se identificaron dos vías genéticas que regulan la
actividad de la insulina y que son responsables de la reducción, asociada
con la edad, de la habilidad de regenerar axones (ramificaciones) en
neuronas de gusanos. El equipo también identificó otras dos vías que regulan
la capacidad de las neuronas para regenerarse, pero que no tienen conexión
con la edad de los gusanos.

El gusano C. elegans es un excelente modelo de estudio para el análisis
genético del envejecimiento. Mediante la manipulación de familias de genes
que regulan la actividad de la insulina, ya se observó en estudios
anteriores que se incrementa drásticamente la expectativa de vida de este
organismo. Este nuevo estudio revela que la señalización mediada por
insulina también afecta directamente al sistema nervioso.

El objetivo de esta fascinante línea de investigación es averiguar más
detalladamente cómo vías diferentes de señalización regulan de manera
coordinada el envejecimiento neuronal, y más específicamente, cómo conseguir
regenerar neuronas sin que la edad de la persona sea un impedimento.

la tercera, Ciencia de los Materiales.

Manipular luz y sonido mediante materiales flexibles.

Ciertos materiales flexibles, estructurados en capas y con arrugas
nanométricas, podrían brindar un nuevo modo de controlar la longitud y
distribución de ondas, sean sonoras o luminosas. A la postre, esto podría
encontrar aplicaciones que van desde métodos no destructivos de poner a
prueba materiales, hasta cancelación de ruido, y también podría proporcionar
nuevos y reveladores datos sobre estructuras biológicas blandas y
posiblemente conducir a nuevas herramientas de diagnóstico.

Aunque ya se sabe que las propiedades de los materiales afectan a la
propagación de la luz y del sonido, en la mayoría de los casos estas
propiedades son fijas y difíciles de modificar una vez que el material ha
sido creado. Sin embargo, en estos materiales estructurados en capas,
cambiar las propiedades (por ejemplo, "ajustar" un material para que filtre
colores específicos de la luz) puede ser tan simple como estirar un material
flexible.

Éste es el enfoque de diseño que ha adoptado el equipo de Stephan Rudykh del
Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) en la ciudad estadounidense de
Cambridge, y Mary Boyce, ahora en la Universidad de Columbia en la ciudad de
Nueva York.

Estos científicos han comprobado que dichos efectos en sus nuevos materiales
son altamente ajustables, reversibles y controlables. Por ejemplo, se puede
cambiar el color del material, e incluso sería factible hacer que fuera
óptica o acústicamente invisible.

En el par de imágenes de arriba, casi no son afectadas las ondas
sonoras -bandas azules y amarillas- que atraviesan un material con
superficie plana y estructurado en capas. En las imágenes de abajo, cuando
el sonido atraviesa un material estructurado en capas y con arrugas
especiales, ciertas frecuencias de sonido son bloqueadas y filtradas por el
material. (Imagen: Felice Frankel)

Es posible fabricar estos materiales mediante un proceso de deposición capa
a capa, que puede ser controlado con alta precisión. El proceso permite
controlar el grosor de cada capa hasta en una fracción de una longitud de
onda de luz. El material luego es comprimido, creando en su interior una
serie de arrugas precisas cuya distancia de separación puede causar la
dispersión en las frecuencias seleccionadas de las ondas (sean sonoras o
luminosas).

Diseñando esa microestructura de forma que se obtenga el conjunto deseado de
efectos, y luego alterando esas propiedades al deformar el material, es
posible controlar estos efectos mediante estímulos externos.

Muchas son las aplicaciones potenciales de esta nueva tecnología.

La más obvia es la "invisibilidad acústica", una forma avanzada de
cancelación de ruido con la que se podrían bloquear completamente sonidos
provenientes de cierto volumen del espacio, en vez de un solo punto, como en
los actuales auriculares para cancelación de ruido.

Otro campo de aplicación estaría en la propagación de los ultrasonidos a
través de tejidos biológicos. Las técnicas de diagnosis por escaneo
ultrasónico han avanzado mucho en los últimos años, pero aún carecen de la
suficiente resolución para reemplazar a métodos de diagnóstico más invasivos
y aparatosos. La vía abierta con la nueva tecnología podría conducir a un
control más preciso de estas ondas de ultrasonido, y por tanto a sistemas
con mejor resolución.