Fichero publicado por Josias Vásquez - chobe

Nota: esta publicación fue revisada por su autor hace 5 años.

Blindworlds recorriendo el mundo, y se detiene en... 17- EL MIRADOR, GUATEMALA DE LA MANO DE JOSI VÁSQUEZ, Y LA NARRACIÓN DE DIEGO RIZZO

paseo por el mirador en las pirámides mayas de Guatemala.

es el viaje de un amigo que narra su experiencia, al viajar a El mirador, ubicado en Petén Guatemala.

¡Disfruta el viaje!

Diego Rizzo
Así fue mi aventura:
El lunes salimos de San Benito hacia San Andrés. Al llegar a San Andrés está el cruce hacia Carmelita-El Mirador. Adelante empieza la carretera de terracería, son como hora y media para llegar a la primer garita de acceso, de ahí mas o menos otra hora y media para llegar a Carmelita. Ahí te esperan con desayuno y después se inicia la caminata hacia La Florida (sitio arqueológico) donde solo se hace un descanso y se almuerzan unos panes y de ahí se sigue hacia El Tintal (sitio arqueológico) donde te quedás ese día en un campamento en tiendas de campaña. Al día siguiente salís para El Mirador, en el camino se ven saqueos de algunas tumbas y unas pirámides que se llaman La Muerta, los guías dicen que eran como un tipo de capillas de velación y abajo enterraban a las personas. Por ahí cerca hay un mascarón grande que se cree era el "sello" del señor Kan o Kan Ajaw. Como a 45 minutos al fin se llega al esperado sitio El Mirador.
Ahí ya caminamos 52 kms, jejejeje . Son 22 kms el primer día y 30 el segundo; aquí es donde está el problema porque es un terreno complicado porque está encharcado y con mucho lodo, eso hace más difícil caminar y es súper incómodo porque aunque llevamos botas para caminar o hiking (esto es obligatorio, si no no lo recomiendo), aún así el agua y el lodo se te meten a los pies y es muy incómodo estar así.
Como una hora más o menos antes de llegar a El Mirador, hay que pasar por una aguada, que eran como las reservas de agua que los Mayas utilizaban para abastecerse de agua, ahí el agua llega a la rodilla, son como 200 metros los que se caminan así.
Ese día que se llega a El Mirador solo estamos en la plaza donde está el campamento y aprovechás a darte un buen baño (con cubeta y a guacalazos, jejeje) pero se siente tan bien!!! y después de eso a cenar y a descansar. El tercer día todo el día se pasa en El Mirador, yo me escapé con el otro grupo a ver el amanecer desde El Tigre, de ahí regresé a desayunar y después salimos hacia La Danta (la pirámide más grande del mundo), no está toda descubierta, solo la parte más alta, pero igual es un show y es una paz increíble la que se siente estar en la cima del mundo Maya, desde La Danta se puede ver Nakbé (creen que es la primer ciudad Maya) y al horizonte se ve Calakmul (esto ya es del lado de México), El Tintal que es donde nos quedamos el primer día y se ven las pirámides de El Tigre y Los Monos (estos si están dentro del sitio El Mirador); lo que se ve son los montículos cubiertos de árboles, no es que se vean las pirámides pero si se logra distinguir.
Al bajar de La Danta, se pasa por La Pava (otra pirámide), el templo La Garra del Jaguar (esta creen que es una tumba de un gobernante muy importante por el detalle de la estructura y en el interior de la misma hay un mascarón de algún gobernante, esto no se puede ver lamentablemente a menos que se tenga la suerte que esté el arqueólogo cuando uno esté por ahí).
Regresamos al campamento a almorzar, descansar un poco y después fuimos a ver el atardecer a la pirámide El Tigre, eso es sin palabras describirlo, además nosotros tuvimos la suerte que no hubieran nubes y las estrellas, constelaciones, planetas, vía láctea y todo lo que uno se pueda imaginar estaban a más no poder!!
Nunca en mi vida había visto tantas estrellas es un espectáculo del Señor impresionante, sin palabras y que no tiene comparación con nada.
Al siguiente día empezamos el regreso hacia El Tintal, ya nos sentíamos con más experiencia para caminar en la selva así que acortamos el tiempo como en una hora, jejeje, ese día cenamos en El Tintal y dormimos la última noche en la selva, ese día todavía subí a ver el atardecer a una pirámide llamada Henequén; cuando llegamos a El Tintal empezó a llover fuertísimo como durante 15 minutos y después se quedó de lo más tranquilo y relajante, de un lado se miraba las nube gigante de lluvia avanzando hacia El Mirador y del otro lado el cielo despejado con tonos rosas y naranjas del atardecer. Me enoja porque por subir al Henequén no me llevé la cámara porque era cuando estaba lloviendo pero me pegué una empapada que lo que hice fue ir a bañar en lugar de regresar a traer la cámara para tomar fotos de ese espectáculo, lo que si hice fue sentarme un rato con frío y temblando pero aproveché a disfrutar otro poco de la creación, eso fue impresionante! otra cosa por la que no regresé es porque ya los pies no dan más, ya están todos doloridos y ya no quieren reaccionar, por eso fue que más ya no quise.
El siguiente y último día dejamos El Tintal rumbo a Carmelita, este tramo, por mucho, es el que pasa factura de todo, los pies ya no dan, es un dolor increíble, el cuerpo ya va cansado (a pesar de tener condición, igual el cuerpo y la mente se cansan), todo el tiempo es una combinación de condición física, estarte motivando mentalmente y una concentración para ver donde pisas, te agarrás o si no hay ramas en el suelo con las que te tropecés o que te podás golpear la cabeza. La última hora es la peor, esa última hora te saca todo, es la peor parte del terreno, ya no das más y los pies ya no responden, literalmente dan ganas de quedarte tirado, pero puede más la idea de que ya vas a terminar. Durante todo el camino no se siente el tiempo ni cómo pasan las horas, ese último día se siente que no pasa el tiempo y la última hora parecieran tres!!!!
Cuando por fin salimos del sendero y llegamos al camino de la comunidad Carmelita, es una mezcla de orgullo de haber caminado más de 100 kms, cansancio increíble, dolor de pies que no se puede describir, emoción, etc, etc. Pero la verdad que regresaría sin pensarlo!
Te la comparto porque así como la leas, sé que te vas a imaginar estar ahí. Muchos no tienen la posibilidad de ir y al menos por un relato que les he contado se pueden imaginar lo que es. Por eso lo quise compartir. Cuidate!
pueden encontrar más información en su fanpage.
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el audio es la canción ¡por qué será? de Sololá en marimba (instrumento nacional) en la voz de Paco caceres