Texto publicado por SUEÑOS;

La Vos Del Alma:

Al despertar cada mañana

Al despertar cada mañana eleva todo tu ser hacia Mí, que tu pensamiento llegue a lo más alto. Sabe que este día está bendecido por Mí y cada paso que des en él, te colma con Mi Luz y caminas en la verdad y la comprensión. Que tus pensamientos sean solamente positivos. Sabe que será un día totalmente bendecido por Mí, y lo será.

En esos momentos del despertar puedes establecer el modelo para el día. ¿Te quedas allí dando gracias por Mis dones, por todas las bendiciones que Yo derramo sobre ti o lamentas el hecho de que sólo es otro día? La forma como reaccionas en esos primeros momentos puede matizar todo tu día con belleza, maravilla, gloria, todo lo que es perfecto y positivo, o con negatividad. Obsérvate cuidadosamente cada mañana cuando te despiertas y atraes a ti lo mejor de tus pensamientos más elevados. Transporta esto a lo largo del día, colmándolo con lo mejor. Cuando cierras los ojos a la noche nunca olvides dar gracias por todo lo que ha sucedido durante el día. Haz resaltar las cosas más relevantes y demórate en ellas con gratitud. Ve cómo han afectado tu vida y la vida de otros. Lleva a tu sueño un corazón agradecido, amoroso y comprensivo. Eleva tu conciencia y deja que tus pensamientos moren en Mí y luego tú solamente puedes pensar lo mejor.

Cuando te enfrentes con lo que parece ser un problema insuperable, eleva tu conciencia y obsérvalo desde ese estado elevado. Luego lo verás a una luz diferente y considerarás cómo puedes superarlo. Date cuenta de que siempre hay otra forma y nunca abandones hasta que la hayas encontrado.

Serénate y déjame usarte como Yo deseo. Que se haga Mi voluntad.

Conserva tu sentido del humor

La vida es un constante dar y recibir, un constante inhalar y exhalar el hálito de vida. No podrías pasar todo el tiempo inhalando sin exhalar, así como no puedes pasar el tiempo dando sin recibir.

Cuando la vida deja de ser un camino para dos se seca y muere. Cada ser tiene que aprender a vivir una vida, y vivir en grupo lo revela muy claramente. Ningún ser puede vivir enteramente por sí mismo; tiene que aprender a vivir para otros y con otros. Debe haber un constante dar y recibir en todos los niveles, en orden, para que se mantenga perfecta paz y armonía.

Cada uno da en un nivel diferente y de una manera diferente, por lo tanto, no debe haber comparación o crítica de uno a otro. Como cada uno es guiado desde su interior, sabrá cuál es su parte de la totalidad y, tranquila y silenciosamente, irá adelante para hacer lo que tiene que hacer. Debe haber una constante búsqueda interior y una gran sensibilidad y conciencia desarrollada para permitir que esto se manifieste. Debe haber equilibrio en todas las cosas y en todos los tiempos.

Que nunca la vida sea demasiado seria o demasiado severa. Ve el lado más ameno y ten sentido del humor. Te digo que debe existir risa y alegría en el vivir. Que haya mucha alegría. Cuando sientas el gozo surgiendo en ti, déjalo manifestarse y compártelo con quienes te rodean. ¡La alegría es contagiosa! Un alma burbujeando de gozo puede afectar a todos, así que déjala burbujear.

Nunca reprimas tus sentimientos de verdadera felicidad y agradecimiento; exprésalos con palabras y acciones y permite que haya más alegría. Siempre hay un lado ameno y gracioso en todo, si lo buscas. Cuando aprendas a vivir en plenitud en el momento, sin un pensamiento en el mañana, tu vida verdaderamente se llenará de amor, gozo y armonía. I Que brote la alegría y te desborde y disfrutes de la vida plenamente.

Revisa tus relaciones con los que te rodean

Date cuenta de que no puedes ayudar a un alma a menos que esa alma realmente desee ayuda y esté lista para recibirla. Te digo que le envíes nada más que Amor y más Amor. Quédate sereno y espera, pero está presente allí, cuando esa alma solicite ayuda.

Cuando estás enseñando a un niño pequeño a lustrarse los zapatos, por ejemplo, tienes que ser paciente y observarlo cómo es desmañado para atarse los cordones. Debes sentarte y mirarlo, animándolo de vez en cuando, mostrándole cómo lo tiene que hacer, sin hacerlo por él, hasta que finalmente, triunfante, domine el arte.

Se necesita mucha paciencia, no sólo con el que está aprendiendo sino también con el que enseña. Si tú haces todas las cosas por un niño, nunca aprenderá, nunca se parará en sus pies ni será independiente, sino que relegará todo en ti para que lo hagas por él. Eso es lo que pasa con un alma en el sendero espiritual. Tengo que sentarme atrás pacientemente y observar cómo cada uno comete un error tras otro, sin interferir de ninguna manera, sino cuando esa alma clama pidiendo ayuda. Yo estoy allí en un instante para animar, para consolar y dirigir, pero nunca para hacer las cosas por ella. Todos deben aprender a hacer su propio trabajo, pero Conmigo para guiar y dirigir. No desmayes o te descorazones cuando veas a un ser tomar el camino equivocado. Date cuenta de que tiene que aprender una lección importante y aprenderá más rápidamente de esa manera que de cualquier otra.

El enojarte, impacientarte e irritarte no ayuda a nadie. Hay mucho que aprender.

Nunca terminas de aprender a través de toda la vida. No permitas que nada te venza. Decídete a lograr la victoria y así lo harás.

De vez en cuando revisa tus relaciones con aquellos que te rodean. Revisa sus motivos y sus actitudes. Mira en tu interior, antes de culpar a alguien. Ve lo que puedes hacer personalmente para corregir un error y hazlo instantáneamente. No esperes que la otra persona haga el primer movimiento. Haz una buena limpieza de vez en cuando y comienza nuevamente.

Así como piensas, eres. Ten pensamientos afectuosos, positivos y verás que los rayos del sol irrumpen e impregnan todo de luz, disipando las nubes oscuras y trayendo belleza y armonía por doquier. Es muy fácil decir "Amaos los unos a los otros", pero realmente es una cosa muy diferente hacerlo.