Texto publicado por Luci Saes

reflexión

La risa

¿Por qué esperar motivos?
La vida tal como es, debería ser suficiente razón para reír.
Es tan absurda, tan hermosa… ¡Tan maravillosa!
¡Es un montón de cosas sucediendo al mismo tiempo!.

La risa es la cosa más fácil del mundo si la permitimos.
pero se ha convertido en algo difícil.
La gente se ríe muy rara vez, y cuando lo hace, muchas veces no es una risa verdadera.

Las personas ríen como si le hicieran un favor a alguien,
como si cumplieran un cierto deber.
Pero lo cierto es que la risa es diversión,
¡no es un favor a nadie!
Igual que con el amor.

También el amor es diversión.
La vida es diversión.
Pero de algún modo, en la mente de la gente ha calado hondo que “estamos cumpliendo con un deber”.

No se debería reír para hacer feliz a otro,
porque si no somos felices, no podemos hacer feliz a nadie.
Simplemente deberíamos reír por voluntad propia y sin que exista un motivo particular.

Si empezamos a analizar las cosas, no seremos capaces de dejar de reír. Sencillamente, todo es perfecto para la risa, no falta nada,
pero no lo permitimos. Somos muy mezquinos con la risa, con el amor, con la vida.
En cuanto sepamos que podemos dejar de ser mezquinos,
pasaremos a una dimensión diferente, más amorosa,¡y a una nueva forma de vivir la vida!.