Texto publicado por Jaime Nelson Arboleda Barrera

*_Balamce:
_*

Necesitaba una limpieza en mí, y es el momento.. deshacerme de los
pensamientos no deseados, limpiar los herrumbrados.. entonces, abrí el
baúl de los recuerdos y saqué de él los que no uso y los que ya no
quiero más.

Tiré algunos sueños, y también algunas ilusiones ya caducadas..
proyectos que nunca usé, sonrisas que jamás repartí.. Dejé atrás las
broncas y el rencor de las flores marchitas que estaban en aquel viejo
libro..

Miro mis futuras sonrisas y mis alegrías predeterminadas y las voy
acomodando en una cajita.. bien ordenadas.

Saqué todo de las valijas(que me acompañaron los últimos años) y fui
dejando las cosas en el piso: pasiones escondidas, deseos reprimidos,
palabras horribles que nunca quise decir y tampoco recibir, heridas de
un amigo, recuerdos de momentos tristes..

Pero también encontré cosas muy lindas, me fui dejando llevar por el
encanto y la magia.. me senté en el piso para elegir..

Tiré a la basura, sin pensar demasiado, los restos de un amor que me
hirió, las palabras de rabia y dolor que estaban por encima de todo..
Otras cosas que aún me hieren, las dejé aparte, no muy escondidas.. para
así ver lo que hago con ellas.. si las olvido o las mando a la basura..

Era aquél baúl, en que uno guarda todo lo que considera más importante:
amores, alegrías, sonrisas, esperanzas.. junté de él y con afecto, el
amor encontrado, doblé ordenaditos los deseos, puse perfume a la
esperanza, pasé un pañuelito de seda en el estante de mis metas y las
dejé a la vista para no olvidarlas..

Puse en los estantes de más abajo algunos recuerdos de la infancia y los
de mi juventud y colgado frente a mi, mi capacidad de amar.. Y
principalmente, ¡la de recomenzar!

Mónica Zarcetti

Mónica

24/12/2010