Texto publicado por Jaime Nelson Arboleda Barrera

Ocurrencia de un borracho.

Un borracho estaba orinando  en la calle; pasa una señora, y dice: ¡¡ qué horror,  que bestia, que monstruo..!  Y el borracho le contesta: pase tranquila señora, que lo tengo agarrado del pescuezo.