Texto publicado por Daniel Ayala, El testigo

Texto del día martes 20 de octubre del año 2020.

“Examinando las escrituras”.
Texto del día martes 20 de octubre del año 2020.

A Jehová pertenecen los cielos y la tierra y todo lo que hay en ella
(Deut. 10:14).

Como Jehová creó a los seres humanos, nosotros también le pertenecemos
(Sal. 100:3; Rev. 4:11).
Sin embargo, a lo largo de la historia, Jehová ha escogido a determinados grupos de personas para que sean su propiedad de un modo singular. Por ejemplo, en el Salmo 135 se dice que los siervos fieles de Dios del antiguo Israel eran su “propiedad especial”
(Sal. 135:4).
Además, el libro de Oseas predijo que algunos no israelitas llegarían a ser parte del pueblo de Jehová
(Os. 2:23).
Esta profecía se cumplió cuando Dios empezó a incluir a quienes no eran judíos entre los que llegarían a reinar con Jesús en los cielos
(Hech. 10:45; Rom. 9:23-26).
A estas personas ungidas con espíritu se las llama “una nación santa”, una “posesión especial” de Jehová
(1 Ped. 2:9, 10).
Y a la mayoría de los cristianos fieles de la actualidad, que esperan vivir en la Tierra, Dios también los considera su “pueblo” y sus “escogidos”
(Is. 65:22).
w18.07 22 párrs. 1, 2

La Biblia. Traducción del Nuevo Mundo.

Deuteronomio 10:14.
14 Mira, a Jehová tu Dios le pertenecen los cielos, incluso los cielos de los cielos, y la tierra con todo lo que hay en ella.

Salmo 100:3.
3 Sepan que Jehová es Dios. Él es quien nos hizo y nosotros le pertenecemos. Somos su pueblo y las ovejas de sus pastos.

Apocalipsis 4:11.
11 “Jehová nuestro Dios, tú mereces recibir la gloria, la honra y el poder, porque tú creaste todas las cosas, y por tu voluntad llegaron a existir y fueron creadas”.

Salmo 135:4.
4 Porque Jah ha elegido para él a Jacob, a Israel como su propiedad especial.

Oseas 2:23.
23 Como semilla, la sembraré para mí en la tierra, y le mostraré misericordia a la que no se le mostró misericordia; a los que no son mi pueblo les diré “Ustedes son mi pueblo”, y ellos dirán “Tú eres mi Dios”’”.

Hechos 10:45.
45 Y los creyentes circuncisos que habían ido con Pedro estaban asombrados porque el regalo del espíritu santo también se estaba derramando sobre gente de las naciones,

Romanos 9:23-26.
23 ¿Y qué si lo hizo para dar a conocer las riquezas de su gloria sobre vasijas de misericordia que él preparó de antemano para la gloria, 24 es decir, nosotros, a quienes llamó no solo de entre los judíos, sino también de entre la gente de las naciones? 25 Es como él dice también en Oseas: “Llamaré mi pueblo a los que no son mi pueblo y llamaré amada a la que no era amada. 26 Y, en el lugar donde se les dijo ‘Ustedes no son mi pueblo’, allí serán llamados hijos del Dios vivo”.

1 Pedro 2:9, 10.
9 Pero ustedes son “una raza escogida, un sacerdocio real, una nación santa, un pueblo que es una propiedad especial, para que anuncien por todas partes las excelencias” del que los llamó de la oscuridad a su luz maravillosa. 10 Porque en un tiempo ustedes no eran un pueblo, pero ahora son el pueblo de Dios; en un tiempo a ustedes no se les había mostrado misericordia, pero ahora se les ha mostrado misericordia.

Isaías 65:22.
22 No construirán casas para que otros vivan en ellas ni plantarán para que otros coman. Porque los días de mi pueblo serán como los días de un árbol, y mis escogidos disfrutarán al máximo del fruto de su trabajo.

Fuente de consulta:
BIBLIOTECA EN LÍNEA Watchtower
jw.org