Texto publicado por Daniel Ayala, El testigo

Texto del día lunes 5 de octubre del año 2020.

“Examinando las escrituras”.
Texto del día lunes 5 de octubre del año 2020.

¡Cómo amo tu ley, sí! Todo el día ella es mi interés intenso
(Sal. 119:97).

Para proteger el corazón, no solo debemos cerrarles el paso a las malas influencias, sino también abrírselo a las positivas.
En las ciudades amuralladas, el portero cerraba las puertas para impedir que entrara el enemigo. Pero en otros casos las abría para permitir la entrada de alimentos y otras provisiones. De no hacerlo, los habitantes morirían de hambre. De modo parecido, tenemos que abrir con regularidad nuestro corazón para que entren las enseñanzas de Jehová.
En la Biblia, encontramos los pensamientos de Dios. Por eso, siempre que la leemos, permitimos que estos influyan en nuestra manera de pensar, sentir y actuar. A fin de aprovechar al máximo nuestra lectura de la Biblia, debemos hacer dos cosas. En primer lugar, es imprescindible orar para que Jehová que nos ayude a ver “las cosas maravillosas” que contiene su Palabra
(Sal. 119:18).
En segundo lugar, debemos meditar en lo que leemos. Cuando hacemos todo esto, la Palabra de Dios alcanza lo más profundo de nuestro corazón y llegamos a amar la forma de pensar de Jehová
(Prov. 4:20-22).
w19.01 18 párrs. 14, 15

La Biblia. Traducción del Nuevo Mundo.

Salmo 119:97.
97 ¡Cuánto amo tu ley! Reflexiono en ella todo el día.

Salmo 119:18.
18 Ábreme los ojos para que vea con claridad las maravillas de tu ley.

Proverbios 4:20-22.
20 Hijo mío, presta atención a lo que te digo; escucha cuidadosamente mis palabras. 21 No las pierdas de vista; guárdalas muy dentro de tu corazón. 22 Porque significan vida para quienes las encuentran y salud para todo su cuerpo.

Fuente de consulta:
BIBLIOTECA EN LÍNEA Watchtower
jw.org