Texto publicado por Artexanita

¿Habéis oído hablar de la “dimensión Nebulosa”?
¡Posiblemente no!, pero yo os digo que existe! Es un espacio indefinido entre la luz y la oscuridad, entre la bruma más densa y obscura y las blanquísimas nubes que se elevan ingrávidas sobre vuestras cabezas.
¡La conozco bien!, pues me parece llevar eones, atrapada en su perenne obstinación.
A veces crees estar en un onírico y paralelo universo donde sonidos y percepciones, olores y táctiles sensaciones te hacen creer que estás en el mundo real. Pero cuando abres los ojos, todo se derrumba a tu alrededor, como un frágil castillo de naipes.

Buscas las añoradas imágenes, tan familiares, los brillantes colores que antaño inundaban tus retinas…
Hoy de nuevo, vuelvo a intentarlo, ¡huir, escapar del caliginoso y denso espacio!
Apoyas la mano en la fría barandilla de esta enorme escalera de caracol, y recuerdas aquellas últimas luces anaranjadas que brillaban con esplendor tras las altas cristaleras.
Hoy vuelves a intentarlo…
Y escuchas la voz de alguien que te llama por tu nombre…
Hoy de nuevo, estás en el frío quirófano, ¡oyes las mismas voces diciéndote: -Animo todo irá bien, ya verás!
Hoy vuelves a sentir la esperanza aletear dentro de tu corazón cuando estás frente al doctor que te dice: -ahora voy a retirar la venda y sientes tu corazón latir con fuerza…
Hoy de nuevo, deseas más que nada en el mundo poder ver ese rostro, esos ojos que con seguridad te miran con ternura…
Pero la venda es retirada, y abres muy despacio tus doloridos ojos, y una infinita pena te embarga… cuando te das cuenta que sigues inmersa en la ya conocida, “Dimensión Nebulosa”.

Artexanita