Texto publicado por Daniel Ayala, El testigo

Texto del día sábado 18 de marzo del año 2017.

“Examinando las escrituras.”
Texto del día sábado 18 de marzo del año 2017.

Si alguien quiere ministrarme, el Padre lo honrará
(Juan 12:26).

En Jerusalén había algunos judíos de origen griego que habían ido a celebrar la Pascua.
Impresionados por los milagros de Jesús, le pidieron a Felipe que les permitiera conocerlo. No obstante, Jesús estaba concentrado en cosas demasiado importantes para dejarse distraer. No le interesaba ganarse el apoyo de la gente para que lo defendiera de sus enemigos, que estaban a punto de matarlo. Por eso, después de recordarles a Andrés y a Felipe que estaba a punto de morir, les dijo: “El que tiene afecto a su alma la destruye, pero el que odia su alma en este mundo la resguardará para vida eterna”.
En vez de tratar de satisfacer la curiosidad de aquellos judíos griegos, les aconsejó que siguieran su ejemplo de abnegación y les hizo la promesa que leemos en el texto de hoy. De seguro, Felipe llevó de vuelta esta animadora respuesta
(Juan 12:20-25).
Es cierto que Jesús llevó a cabo su misión de predicar las buenas nuevas sin distraerse. Pero eso no significa que solo pensara en el trabajo.
w15 15/10 3:13, 14

Fuente de consulta:
BIBLIOTECA EN LÍNEA Watchtower