Texto publicado por Daniel Ayala, El testigo

Texto del día viernes 23 de diciembre del año 2016.

“Examinando las escrituras.”
Texto del día viernes 23 de diciembre del año 2016.

Con el entierro de un asno será enterrado
(Jer. 22:19).

La Biblia menciona a algunas personas que recibieron una enorme herencia espiritual pero no supieron valorarla. Ese fue el caso de los hijos del profeta Samuel, quien sirvió a Jehová desde pequeño y siempre le fue fiel
(1 Sam. 12:1-5).
Samuel les dejó un excelente ejemplo a sus hijos, Joel y Abías, pero ellos no lo apreciaron, y se hicieron malos y corruptos. La Biblia dice que, a diferencia de su padre, ellos “pervertían el juicio”
(1 Sam. 8:1-5).
Algo parecido ocurrió en el caso de la familia del rey Josías, un excelente siervo de Dios
(2 Rey. 22:8; 23:2, 3, 12-15, 24, 25).
Tres de sus hijos y uno de sus nietos llegaron a ser reyes, pero ninguno demostró que apreciaba lo que él les había transmitido
(2 Rey. 23:31-34; 24:8, 9, 18, 19).
Todos estos hombres tuvieron la oportunidad de amar a Jehová y de hacer lo correcto pero, por desgracia, no la aprovecharon.

Fuente de consulta:
BIBLIOTECA EN LÍNEA Watchtower