Texto publicado por Jaime Nelson Arboleda Barrera

Cabeza de chorlito.

Marianne Moore.
Cabeza de chorlito (Bird-witted).
 
Con inocentes ojos abiertos de pingüino, 
                           tres grandes sinsontes inexpertos bajo
                               el sauce
                               permanecen en fila,
                         ala con ala, delicadamente solemnes,
                          hasta que ven
                          a su madre tan grande
                          como ellos trayendo
                          algo que parcialmente
                          alimentará a uno.
 
Hacia el agudo crujido intermitente
  de carro con ballestas rotas, que
emiten los tres cuerpecitos sumisos
  moteados de prímulas,
ella se dirige; y cuando
del pico
       de uno, el escarabajo
       aún vivo cae
al suelo, ella lo recoge y se lo
vuelve a dar.
 
Permanece en la sombra hasta que ellos se peinan
  su denso plumaje filamentoso,
recubierto del pálido manto del sauce,
  extienden la cola y
las alas, mostrando, uno a uno,
la sencilla
       raya blanca que recorre la
       cola y atraviesa
el ala por debajo, y el
acordeón
 
se vuelve a cerrar. ¿Qué delicioso trino,
  de rápidos e imprevistos sones
aflautados brotando de la garganta
  del astuto
pájaro adulto, llega del
lejano
       aire tibio
       otoñal antes
de que la prole estuviera aquí? Qué áspera
se ha vuelto la voz del pájaro.
 
Un gato moteado los observa,
  arrastrándose lento hacia el pulcro
trío sobre el tronco del árbol.
  Como no lo conocen
los tres le hacen sitio, inquietante
y nueva dificultad.
       Una pata que pende, perdido
       el control, se levanta
y encuentra la ramita sobre la
que planeaba colgarse. La
madre como una saeta, animada por lo que hiela
  la sangre y recompensada por la esperanza-
de la lucha- puesto que nada llena
  las chirriantes bocas
hambrientas, emprende un combate a muerte
y medio mata
       con pico de bayoneta y
       alas despiadadas al
gato intelectual
que repta cauteloso.
 
 
Cabeza de chorlito (Bird-witted).
Marianne Moore.
 
traducido por Olivia de Miguel.