Texto publicado por Daniel Ayala, El testigo

Texto del día domingo 13 de noviembre del año 2016.

“Examinando las escrituras.”
Texto del día domingo 13 de noviembre del año 2016.

Esto significa mi “sangre del pacto”, que ha de ser derramada a favor de muchos para perdón de pecados
(Mat. 26:28).

Dios podía aplicar el valor de la sangre de Jesús a los descendientes de Adán. También podía adoptar “como hijos” a algunos seres humanos fieles ungiéndolos con espíritu santo
(Rom. 8:14-17).
Como a los ojos de Dios estarían limpios de pecado, en cierto sentido serían como Jesús, el Hijo de Dios. Llegarían a ser “coherederos con Cristo” y tendrían la oportunidad que la nación de Israel perdió, la de llegar a ser “un reino de sacerdotes”
(Éx. 19:6).
Respecto a estos “coherederos con Cristo”, el apóstol Pedro dijo: “Son ‘una raza escogida, un sacerdocio real, una nación santa, un pueblo para posesión especial, para que declaren en público las excelencias’ de aquel que los llamó”
(1 Ped. 2:9).
¡Qué importante es el nuevo pacto! Permite que algunos discípulos de Jesús lleguen a ser la parte secundaria de la descendencia de Abrahán.

Fuente de consulta:
BIBLIOTECA EN LÍNEA Watchtower