Texto publicado por Daniel Ayala, El testigo

Texto del día viernes 10 de junio del año 2016.

“Examinando las escrituras.”
Texto del día viernes 10 de junio del año 2016.

No dejarás mi alma en el Seol
(Sal. 16:10).

Una buena razón para creer en la resurrección de Jesús es que sus discípulos predicaron con convicción que él había resucitado. Muchos de ellos fueron perseguidos, sufrieron o incluso murieron por proclamar que Jesús estaba vivo.
Recordemos que Pedro defendió su resurrección ante los líderes religiosos que odiaban a Cristo y que habían tramado su ejecución. ¿Habría arriesgado su vida por una mentira?
Tanto Pedro como los demás discípulos estaban seguros de que Jesús vivía y dirigía la predicación. Es más, su resurrección les garantizó que ellos también serían resucitados. Eso sucedió en el caso de Esteban, quien murió convencido de que volvería a vivir
(Hech. 7:55-60).
Si Jesús no hubiera resucitado, quizá nunca habríamos oído hablar de él. Pero tenemos pruebas convincentes de que está vivo y encabeza la predicación de las buenas nuevas en toda la Tierra.

Fuente de consulta:
BIBLIOTECA EN LÍNEA Watchtower