Texto publicado por Irene Azuaje

Carta de un joven con discapacidad a sus padres; Reivindicando su derecho a una sexualidad plena

Publicado por Vane el 10 de Abril de 2013 a las 11:48pm en Discapacidad y sexualidad

AddThis Sharing Buttons
Share to FacebookShare to TwitterShare to ImprimirShare to Google+Share to Más...

Anuncios

Autora: Vanesa Ruiz García

Queridos papa y mama,

Sé que tengo una discapacidad severa, pero también es importante recordar que también soy persona. Llego veinticuatro años de mi vida, postrado en esta silla de ruedas, por ello, muchos pasan de largo cuando me ven. ¡Muchas chicas me ignoran! Veo gente de mi edad ¡y más jóvenes! Dados de la mano, besándose en el parque… es algo tan romántico… A mí me gustaría algo igual, pero sé que no pasara, o al menos la complicación aumentará considerablemente. Mi corazón, lo puede entender pero mi cuerpo no. Para mí no es fácil, cuando Kate, la cuidadora, me ducha, me viste, me desviste… repito tengo veinticuatro años, no soy un niño, tengo una discapacidad severa, pero mi cuerpo es el mismo. No entiendo, porque no podemos hablar de sexo, ni porque no me dejáis ver videos atrevidos, tengo la misma necesidad que vosotros, no es un antojo, ni un capricho, es una necesidad humana, porque recordáis ¿verdad? No soy un bicho de otro planeta, soy humano. Vosotros ¿con que edad tuvisteis vuestra primera experiencia sexual? No pretendo ser descortés ni nada, solo poneos en mi lugar, si no entendí mal, a mi edad me tuvisteis… no creo que esa fuera vuestra primera experiencia.

No tengáis tantos temores de lo que pasará, no quiero casarme ni nada de eso, bueno sería bonito la verdad, pero no necesito tanto. Solo quiero ver el cuerpo de una mujer, tocarlo, sentir que estoy vivo. ¿Acaso no es algo hermoso? ¿Por qué queréis privarmelo? Es algo que no entiendo… Me permitís ver películas de acción, zombis, muertes, decapitaciones, acciones de mucha sangre y violencia, porque no me dejáis disfrutar de un cuerpo desnudo, de caricias, de besos, de ternura y amor ¿pensáis que no sabré como tratarla? Vosotros, nunca me habéis explicado nada, pero yo me informado, y la tratare con mucho cariño y respeto, nunca haría nada que la lastimara ¿por qué no me dais una oportunidad? ¿Por qué no me tratáis como adulto? ¿por qué no me dejáis elegir a mí? Hace años que superé la mayoría de edad y mi cuerpo es tan apto como el resto de mí ser.

Por favor, tener en cuenta todo lo dicho, yo confío en vosotros, darme una oportunidad, confiar en mí, no os defraudaré ¿Qué opináis?

¿Me la dais?

Fuente: http://revistadiscover.com/blogs/sexualidad/carta-de-joven-con-discapaci...