Texto publicado por Irene Azuaje

Hijos adultos ingratos con la madre

Shoshan 7 enero, 2017 Nos gustaría un comentario tuyo

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Dicen que es de bien nacidos ser agradecidos… pero ¿qué hacer cuando en nuestro entorno y en nuestra vida cotidiana sólo vemos a personas desagradecidas? Ante todo, conviene tener en cuenta que es bueno hacer el bien sin mirar a quien. Es bueno ayudar a otros, ayudar a amigos, familia, y en especial también a los hijos…

Los hijos suelen ser los más desagradecidos:

A veces, nuestros propios hijos, los mismos que siempre han recibido nuestras ayudas y bondades, son los más desagradecidos. Lejos de apreciar lo que haces y sacrificas por ellos, parece que nunca tienen suficiente y siempre quieren más… como si no se diesen cuenta de que lo que les das tiene valor para ti, y que has tenido que hacer sacrificios para dárselo.

Para vivir en paz hay que dar y olvidar. Siempre habrá personas que nos defrauden, que nos han sentir mal… sobre todo los hijos.

Duele que tus hijos pasen de ti:

La ingratitud de los hijos es motivo de dolor profundo en toda madre que ha criado a sus hijos con sacrificios, renunciamientos… y que al final del camino, cuando es ella quien los necesita, se encuentra con que nunca tienen tiempo para ella, siempre tienen algo más importante que hacer, y sus parejas les alejan de la madre. La madre llorando, siente que lo ha dado todo por sus hijos, pero que ellos lo dan por sentado y no dan nada por ella.

Esto no es una situación atípica, es más normal de lo que nos gustaría reconocer.

Hijos adultos que no agradecen nada
Una madre ama a sus hijos, incluso a los ingratos

Cómo responder a la ingratitud de los hijos:

¿Eres madre de hijos ingratos? ¿Madre de hijos que sólo esperan cosas de ti, mientras nunca hacen nada por ti? ¿Qué hacer con hijos así? Primeramente, debes pensar que eres independiente, que te vales por ti misma, que aunque les ames y les quieras, no les necesitas. Puede que lo mejor que puedes hacer es pagarles con su misma indiferencia, escuchando sus problemas pero sin sentirte llamada a solucionarlos. No te molestes por la ingratitud de los hijos, pasa de ellos… no hay mayor castigo que la indiferenciada de una madre hacia los malagradecidos hijos que ha tenido.

Si eres mayor, anciana, y necesitas de tus hijos… acude primero a personas de confianza, pide su consejo y ayuda. A veces hace falta que un tercero les llame la atención para que empiecen a colaborar. Y si ni con eso obtienes nada y siguen ignorando tus necesidades, ve a los servicios sociales y expón tu caso. No es humano que se hagan los tontos y no tengan la decencia de llamar para preguntar cómo estás o qué necesitas. Si de verdad te hacen falta, solicita su ayuda y acéptala si finalmente te la dan. De lo contrario, será mejor ignorarles, y no dejar que crean que cumplen con su buen papel de buenos hijos con visitarte una vez al mes.

Los hijos siempre acaban necesitando a sus padres, por muy mayores que se vuelvan, serás la madre que necesitarán en algún momento. Te lo aseguro, dale tiempo al tiempo y los verás llegar a tu casa, lo que venga de eso sólo es tu decisión.

Cada caso es diferente, cada hijo y cada madre tiene su historia y forma de ser… pero los hijos nunca debiéramos dejar de apreciar y valorar a nuestros padres… y siempre debiéramos estar atentos por si nuestra madre nos necesita, especialmente si ha quedado sola.

Hijos y padres escogemos cómo actuar, qué hacer y sacrificar los unos por los otros… sea cual sea tu decisión personal, espero que hagas lo correcto.

Pero para una madre, por muy desagradecidos que sean sus hijos… siempre serán sus amados hijos.

© Autor: Shoshan.